Roku, Hex y
Chimero son los primeros primates quimeras del mundo (monos individuales hechos
de múltiples óvulos fertilizados de la misma especie). Cada animal tiene seis
diferentes conjuntos de genes en lugar de uno. Para producir cada mono, el
biólogo Shoukhrat Mitalipov y su equipo de la universidad Oregon Health and
Science, colocaron seis embriones unicelulares en una placa Petri y, utilizando
una micropipeta, la agregaron en una sola. Después de unos días, los investigadores
la implantaron a una hembra macaco adulta. Los jóvenes descendientes tienen las células
resultantes de cada uno de los seis embriones uniformemente distribuidas a lo
largo de sus cuerpos.
Los
investigadores produjeron las quimeras con el fin de crear mejores modelos para
estudiar enfermedades humanas. Por ejemplo, el estudio de los cánceres humanos
como en este caso. Los científicos crean estos híbridos para eliminar o mutar
ciertos crecimientos de células, al igual como con los ratones blancos
que desarrollan los tumores. Sin embargo, los modelos de ratón no son tan
útiles. Por ejemplo, más del 90 por ciento de los fármacos probados en ratones
en el laboratorio fallan cuando se utiliza en las personas.
Quimeras, por el
contrario, podría permitir a los científicos realizar mutaciones similares y la
investigación de medicamentos en primates, que son biológicamente más cerca de
los seres humanos, y por lo tanto más propensos a producir datos útiles. Esto
puede incrementar la investigación médica en los primates, sin embargo, este avance está siendo cuestionada por ideas éticas.